El superhéroe polaco
Kacper Teszner, de 11 años, residente de Włocławek, cerca de las instalaciones de Busch en Polonia, es un superhéroe de la vida real. Se enfrentó a un gran monstruo y ganó.
En 2019, Kacper empezó a vomitar, sufrir dolores de cabeza y a ver doble. Kacper tenía hidrocefalia aguda; una acumulación anormal de líquido en las cavidades profundas del cerebro que ejerce presión sobre el tejido cerebral.
Fue operado en el Instituto conmemorativo Centro de Salud Infantil de Varsovia. En cuatro meses, después del tratamiento, Kacper recibió el alta. Lamentablemente, un año y medio después, el 6 de junio de 2020, el mundo de la familia Teszner se desmoronó. Una resonancia mostró que la enfermedad había vuelto de forma agresiva. Era un tipo poco común de hidrocefalia que tenía más probabilidades de reaparición.
Kacper empezó a luchar por su vida de nuevo. Pero las cosas fueron peores que antes. El tumor se había metastatizado en su cabeza y también a lo largo de toda su columna vertebral. Llegados a este punto, los médicos dieron a Kacper cero posibilidades de sobrevivir.
Entonces llegó la esperanza. El Hospital Infantil Nationwide de Ohio (EE. UU.) examinó el caso de Kacper y afirmó que era posible curar el caso. Pero había un gran inconveniente. Los padres necesitaban 4 millones de eslotis polacos para pagar el tratamiento de su hijo. Las tareas de recaudación de fondos comenzaron inmediatamente. Busch, junto con otras empresas e individuos, aportó dinero a la recaudación.
Afortunadamente, esta es una historia con un final feliz. Se alcanzó el objetivo de financiación. Kacper recibió su tratamiento. Recibió quimioterapia y un trasplante de médula ósea en EE. UU. Y el 25 de abril de 2021 voló a Polonia, un superhéroe de la vida real que había derrotado al tumor que amenazaba su vida.